Boda en la Finca Es Fangar | Mallorca | Lola y Virro
Hacia bastante tiempo que no publicaba nada y tenia bastante ganas de hacerlo.
La verdad es que ha sido un tiempo difícil, no sólo para mi, no sólo para la fotografía y los fotógrafos de bodas, ha sido difícil en general lo que nos han tocado vivir, y regresar a una cierta normalidad tampoco está siendo cosa de un día para otro.
Tengo muchas cosas que contar.
La pandemia, la obligada situación nos ha obligado a reinventarnos, adaptarnos a las circunstancia y adoptar nuevas costumbres. A todos nos cuesta salir de esa “zona de confort”, pero los cambios suponen nuevas oportunidades, nuevos retos, nuevas perspectivas. Y aunque dicen que la vida la vivimos mirando al pasado, siempre hay que tener una perspectiva de lo que ha de llegar. Confiar en el futuro.
Este post que hoy publico, es un post que había mucho tiempo que quería publicar (quizás demasiado). Me lo debía, os lo debía y se lo debía a esta pareja tan increíble.
Y las cosas no suceden porque si, todo tiene un lugar y un momento (al menos yo lo creo así) y parece casi el destino que sea precisamente ahora cuando todo ha fluido para que este post vea la luz. Al final del mismo lo entenderéis.
Este post habla de una pareja increíble, de un único, de viajes, de grandes emprendedores pero también habla de complementos de boda, si esos accesorios tan necesarios en una boda, y que en la mayoría de los casos marcan la gran diferencia. Descubriréis en estas fotos una novia muy elegante, vestida con de forma espectacular y con un complemento en concreto que la hacía única (y que a mi me cautivo desde el primer momento): un sombrero tipo canotier.
Lola y Virro soon una pareja de mejicanos increíbles, vitales, divertidos, entusiastas, cercanos y sobre todo emprendedores.
Son una pareja viajera, que hacen unas fotos increíbles (aquí os dejo su web para que vais que cosas tan bonitas hacen) que conocen sitios muy lejanos, lugares increíbles, paradisiacos, épicos; pero decidieron elegir Mallorca como el mejor lugar para celebrar una boda, mas concretamente en la Finca Es Fangar.
Lola conoció la isla muy joven y desde entonces estaba absolutamente enamorada de la misma. Fueron varias las ocasiones en las que regreso con Virro, el cual también se enamoró casi al instante convirtiendo este lugar como un referente en sus viajes.
Y así fue, celebraron allí su boda.
Un lugar increíble rodeado de toda esa gente que aman.
Un éxito de boda de principio a fin. Una de las claves fue la Finca Es Fangar, pero sin duda uno de los pilares fundamentales de esta boda fue Mille Papillons. El engranaje perfecto funciona siempre que haya una persona, como Judit, encargada de supervisar cada mínimo detalle.
Y sin ningún tipo de duda mi amigo, mi compañero de muchas aventuras Javier Abad. Gracias amigo por esto, por tus consejos, por tu animo y por confiar en mi.
Lo que si puedo deciros es mi experiencia como fotógrafo de boda con ellos, y no puede ser mejor. Ellos son de las personas que quieres tener cerca, que te recargan de energía y de positivismo.
Y no quiero olvidarme de como empezaba este texto, os hablaba de las casualidades, de la conexiones y de como todo tine un lugar y un momento; como este post.
Durante la pandemia, obligados a estar en casa, invertí mucho tiempo en mantener mi cabeza ocupada, siempre activa, en no pensar en todo aquello que me estaba perdiendo y si en aprovechar todo el tiempo que tenia disponible.
Y decidí dedicarme a una de las grandes aficiones que he tenido desde siempre: los sombreros (en general, no solo sombreros de boda)
Siempre me ha gustado este tipo de complemento en todas sus versiones y siempre me ha llamado la atención sus formas, colores, accesorios, etc; pero nunca he podido tener acceso a esos sombreros que tanto me gustaban ya que en la mayoría de los casos sus precios eran prohibitivos, por los que durante mucho tiempo los miraba, los admiraba más bien, hasta que en la pandemia me anime a investigar y empezar a hacer esos sombreros que tanto me gustaban.
Y fueron meses increíbles de aprendizaje, investigación, de probar, equivocarme y volver a empezar, etc; y de una manera muy orgánica, muy natural el proceso me llevo hasta el siguiente nivel: tenia muchos sombreros en casa y ya no podia acumular más. Pero mi espíritu artesano quería seguir. Disfruto haciendo esto.
Alguien me recomendó abrir las puertas al mundo y trasladar esa visión: llegar a todas esas personas que probablemente adoraban los sombreros y no podían acceder a ellos por su coste, porque los fabricaban en otros continentes e incluso porque debido a la estandarización de tallas, no encontraban justo el sombreo a medida.
Así nace PalosantoHats. Sombreros artesanos, quemados, pintados, cosidos a mano, en definitiva sombreros handmade. Sombrero hechos con mucho amor. Piezas únicas. Porque en lo imperfecto esta la semilla de la perfección.
Y es una maravillosa casualidad que justo el momento en el que decido abrir esa ventana al mundo, justo nace la necesidad de publicar un post que tenia tantas ganas de publicar, con una novia que justo lleva ese complemento de boda estrella: el sombrero.
No os parece increíble?
PD: Aquí os dejo la web de PalosantoHats (actualmente estamos trabajando en la web) y el instagram para que podáis ir echando un vistazo a lo que hago.
Finca de la boda: Finca Es Fangar
Catering: El Jardin
Wedding Planner: Mille Papillons
Vestido de la novia: Leanne Marshall
Palosantohats: PalosantoHats