Siento que algunas veces los textos de los post que leo (en algunas ocasiones hasta las mismas fotos), suelen estar vacíos de contenido y realidad. Hablan de cosas evidentes (que rozan lo absurdo), colocadas, poco naturales. Siento que están cargados de palabras impostadas (a veces suplantadas).

Por eso, en cada texto intento aportar «algo»: de mi, de mi forma de pensar, de mi relación con las parejas, etc; y trato de dejar a las fotos la verbalización de lo que a ellas les corresponde. A veces siento que no es necesario que hable ni siquiera de bodas o fotografía. No sólo quiero ser evidente, quiero hablar de muchas cosas más, porque no solo soy fotógrafo de boda, también soy UNA PERSONA, con todo lo que ello conlleva.

Que mis parejas son fantásticas es un hecho indiscutible, tanto como que si esto no fuera así no trabajaría con ellas (si!, es una decisión que compete a las dos partes). Todos somos fantásticos de alguna forma, pero es necesario que exista una cierta conexión, no algo místico o mágico, simplemente que nos entendamos, si no, es mejor buscar otras opciones, y no hacernos el camino difícil.

Por todas estás y otras muchas razones quiero que los textos sean complementarios a las fotos, a mi forma de pensar y a mi mismo. Una extensión de mi realidad.

Hoy dando vueltas a lo que quería poner como introducción a estas fotos, recordé algo que había leído, algo que, aunque en otras ocasiones he verbalizado brevemente tenia ganas de compartir. Es algo en torno a lo que giran muchas cosas de mi día a día.

Nunca he comentado de manera tan pública y concreta porque me hice fotógrafo de boda, porque decidí ocupar mi tiempo laboral en esta profesión y no en otra. Y es en el texto que está al final de estas fotos, donde encontré toda la inspiración que necesitaba, y estas fotos son un poco el eco de esas palabras en mi cabeza a lo largo de todos estos años, por esa razón no dejéis de leerlo (al final del post lo encontrareis). Podría utilizar nuevas palabras para explicaros lo que quiero decir, pero las que os dejo abajo son perfectas.

Espero que os guste el conjunto.

“No puedes conectar los puntos mirando hacia delante, tan solo puedes conectar los punto mirando hacia atrás. Así que tienes que confiar que los puntos de alguna manera se van a conectar en tu futuro.

Tienes que confiar en algo.

Tu Dios, el destino, la vida, el Karma, lo que sea. Porque creer que los puntos se van a conectar en el futuro, te dará la confianza de seguir tu corazón, incluso aunque te guie fuera del camino bien conocido, y todo eso marcará la diferencia.

¿Qué te gustara hacer si el dinero no fuera un problema en tu vida?

¿Cómo te gustaría disfrutar de tu vida?

Es tan increíble, que como resultado de nuestro sistema educativo, muchos estudiantes digan:

“Nos gustaría ser pintores, nos gustaría ser poetas, nos gustaría ser escritores, pero todo el mundo sabe que no podemos obtener dinero de esa manera.”

Otros dicen: “A mi me gustaría vivir una vida al aire libre y montar caballos”

Si piensas que ganar dinero es lo más importante, pasaras toda tu vida perdiendo tu tiempo.

Estarás haciendo aquellas cosas que no te gusta hacer, sólo para poder seguir viviendo, y seguir haciendo más cosas que no te gusta hacer. Lo cual es bastante estúpido.

Es mejor tener una vida corta, que esté completa de aquello que te gusta hacer, que una larga existencia vivida de una forma miserable.

Y después de todo, si de verdad te gusta lo que haces, no importa que sea, quizás con el tiempo podrías convertirte en un gran maestro de esa actividad.

Es la única forma de llegar a ser un maestro en algo, sólo si de verdad fluyes con ello.

Después podrás ser capaz de conseguir que te paguen por lo que te gusta hacer.

Pero es absolutamente estúpido, perder tu tiempo haciendo cosas que no te gustan., para seguir haciendo aun más cosas que no te agradan, y finalmente enseñarle a tus hijos que sigan por el mismo camino.

Por lo tanto, es sumamente importante considerar esta pregunta:

¿qué es lo que deseo?

Tu tiempo es limitado.

Así que no lo desperdicies viviendo la vida de otras personas.

No permitas ser atrapado por dogmas, lo cual quiere decir, vivir de los resultados de los pensamientos de otras personas.

No dejes que el ruido de las opiniones de los demás silencien tu voz interior,

Y lo más importante, ten el coraje de seguir tu corazón y tu intuición, de alguna forma ellos ya saben lo que de verdad quieres ser.

Todo lo demás es secundario.

Tienes que encontrar lo que amas.

Y eso es tan cierto para el trabajo como para tus relaciones.

Tu trabajo va a ocupar gran parte de tu vida, y la única forma de estar verdaderamente satisfecho, es haciendo lo que tu crees que es un excelente trabajo, y la única manera de hacer un excelente trabajo, es amar lo que haces.

Si aun no has encontrado aquello que amas, sigue buscando y no te conformes.

Sabrás que lo has encontrado cuando sientas una gran emoción en tu corazón

Y como en cualquier relación exitosa, solo mejora mientras pasan los años.

Así que sigue buscando, sigue probando, sigue aprendiendo.»